Rubén Castro es noticia para lo bueno y para lo malo. Hasta la fecha, había sido capaz de separar perfectamente sus problemas extradeportivos con su rendimiento en el campo, pero casualmente en estas últimas semanas, que su asunto personal está candente, ha bajado de forma ostensible su rendimiento, como también se comprobó anteel Mirandés.
En concreto, el canario solo ha marcado un gol en los últimos siete partidos de Liga, justo desde que conoció la petición de la Fiscalía de 25 meses de prisión por cuatro presuntos delitos de amenazas y maltrato a su expareja.
Se trata de la peor racha goleadora de la temporada para el delantero bético, que acumula 423 minutos sin ver la puerta rival. Pero no solo eso, su participación en el juego ha bajado mucho y eso lo está notando el equipo.
Además, sus 16 goles acumulados ya no son la mejor cifra a título individual en Segunda división. Borja Bastón, delantero del Zaragoza, hizo este domingo un doblete que le sitúa con 17 dianas y le permite auparse al liderato por el Pichichi de la categoría.
Para rematar, el canario vio una cartulina amarilla con el partido ya terminado.